Detenido en Puerto Serrano (Cádiz) , un individuo, con numerosos antecedentes penales, tras arrojar a un guardia civil por la escaleras y golpearle repetidas veces aprovechando que yacía inconsciente en el suelo, según ha informado esta misma tarde El Diario de Cádiz.
La rápida intervención de su compañero, que también recibió numerosos golpes entre puñetazos y patadas, evitaría un ensañamiento mayor. Pese a ello, el agente tuvo que ser trasladado por una ambulancia al hospital de Villamartín donde recibiría 14 puntos de sutura en la cabeza. Afortunadamente se encuentra estable en su domicilio.
Los agentes trataban de evitar con su actuación que el detenido, José Ignacio A. B., de 32 años, que se encontraba en un estado muy violento y de alta excitación, agrediera a su padre invidente y de avanzada edad, quien ha excusado a su hijo argumentando que “llevaba un mes sin tomar la medicación”, según declaraciones al citado diario.
Tras más de tres horas atrincherado en el domicilio familiar, decidió entregarse sin oponer resistencia. El Juzgado número 3 de Arcos de la Frontera ha decretado su ingreso en prisión. Pese a que el 1 de octubre había sido detenido por un presunto delito de agresión sexual en grado de tentativa, el hombre gozaba de libertad.
Se da la circunstancia que en 2015, en este mismo municipio gaditano, el policía local Juan Cadenas perdió un ojo por la brutal agresión a manos de miembros del clan “Los Cachimba”.
Policía H50