La abstención de los socialistas catalanes ha hecho posible una moción en el Parlament para desmembrar la seguridad ciudadana destruyendo la coordinación policial entre Mossos y Policía Nacional.
El Partido Socialista de Cataluña (PSC) se ha puesto del lado de los independentistas en su estrategia de ataque y cuestionamiento del trabajo de la Policía Nacional en esa Comunidad Autónoma, al permitir con su abstención en la votación de uno de los puntos de una interpelación presentada por “Catalunya en Comú Podem” que se prohíba a los Mossos d’Esquadra colaborar en orden público cuando se disponga el uso de pelotas de goma en las labores de restablecimiento de la convivencia.
Objetivo: Prohibir a los Mossos d’Esquadra participar en los restablecimiento del orden público cuando los agentes de la Policía Nacional utilicen pelotas de goma.
Una propuesta impulsada por el grupo Catalunya en Comú Podem, que contó con el apoyo de los partidos independentistas y que salió adelante gracias a la abstención del PSC de Miquel Iceta.
La postura ha indignado a los policías nacionales que han hecho público su malestar a través de comunicados del Sindicato Unificado de Policía (SUP) y la Unión Federal de Policía (UFP).
La interpelación aprobada por el Parlamento catalán vuelve a poner de manifiesto el permanente intento de politizar la seguridad pública, mediante declaraciones e iniciativas que sólo buscan amedrentar a los servidores de la ley y condicionar su trabajo para que la impunidad se abra paso. La tibieza del PSC en este asunto resulta indignante y deplorable y, por tanto, exigimos al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, que se posicione públicamente sobre este grave incidente y desautorice al grupo parlamentario que encabeza Miquel Iceta.
“Consideramos esa posición una ofensa para los policías nacionales de las Unidades de Intervención Policial (UIP) y las Unidades de Prevención y Reacción (UPR) que defienden la legalidad constitucional en esa Comunidad Autónoma con procedimientos legales, técnicas homologables a las de cualquier democracia europea y capacitación muy por encima de la de cualquier otra Policía”, manifiestan desde el SUP.
Por su parte, UFP ha dirigido una carta al director general de la Policía, Francisco Pardo, en la que califican de “sorprendente, cuando no ilegal”, que el Parlament “condicione” la actuación de la Policía Nacional en Cataluña. También que la propia Dirección del cuerpo o Interior no hayan anunciado un recurso contra la moción aprobada.
Por eso, piden al ministro de Interior en funciones, Fernando Grande-Marlaska, que se posicione públicamente y defienda la labora de los policías nacionales. Porque, a su juicio, “el PSC se ha puesto del lado del independentismo y de las antenas políticas del terrorismo callejero”.
Los agentes añoran aquel PSC que lideraba la socialista, Carme Chacón, haciendo una defensa incansable de la Policía Nacional, de la Ley y las resoluciones judiciales. Aquello que ella definía y que su madre, Esther Piqueras, nos recordaba en una reciente entrevista concedida a h50 sobre cómo ser federalista, europeista, catalana y española. Pero sobretodo mostrar, sin titubeo, un apoyo incondicional a las FFCCSE.