¿Hospitales que parecen comisarías? ¿Por qué decimos esto? Un ejemplo manifiesto lo encontramos a las puertas de hospitales como el 12 de octubre o el Gregorio Marañón en Madrid, problemática extensible a la mayoría de ciudades españolas. Una larga fila de vehículos policiales inmovilizados en sus proximidades es la estampa habitual. ¿Qué ocurre?
La explicación es bien sencilla. Los indicativos allí presentes, se encuentran realizando servicio de custodia de presos hospitalizados. La falta de módulos hospitalarios especiales para este tipo de pacientes, obliga a la Policía Nacional a multiplicar sus esfuerzos para montar un dispositivo de seguridad adecuado.
Tampoco existe una planificación eficiente en aras de reducir el número de efectivos para tales menesteres, aglutinando a todos los presos que precisen atención médica en un único centro hospitalario.
Tal como han denunciando recientemente sindicatos policiales como la UFP, este esfuerzo extra se traduce en menos indicativos policiales para combatir la delincuencia en las calles. Un lujo que ciudades como Madrid no se debería permitir si tenemos en cuenta los índices de criminalidad en los últimos años.
Según datos oficiales del Sistema Estadístico de Criminalidad divulgados por el Ministerio de Interior, la delincuencia ha experimentado en la capital de España, una subida del 17,6%.