El cuerpo, conformado por 300 personas y con 44 años de historia (creado en 1975), trabaja a contrarreloj desactivando explosivos, algo que pueden hacer hasta a 400 metros de distancia gracias a un robot que hace radiografías y abre cerraduras, también tienen la sección que se ocupa de accidentes químicos y radiológicos.
España posee uno de los equipos más avanzados del mundo en desactivación de explosivos. Son los Tedax, un cuerpo de 300 personas que, en sus 44 años de historia, ha intervenido en más de 400.000 casos y han desactivado más de 200 coches bombas de ETA.
Los Tedax emplean un robot, que puede costar hasta 500.000 euros, en su labor. “Si se trata de un coche, podemos incluso introducir la llave en la cerradura y abrirlo como si fuera con la mano. Si se trata de una maleta, de una caja, de un maletín, con el robot vamos a poder hacer radiografías, abrirlo, o extraer del interior los componentes que tenga”, explica fuentes policiales.
Sin embargo, la última comprobación la hace un Tedax en persona y vestido con un traje que pesa 29 kilos y un casco de seis. Además, el especialista ha de portar consigo un escudo de 15 kilos que deben llevar con un solo brazo.
También extreman las precauciones con las sustancias químicas, frente a las que se protegen con un traje que está equipado con una botella de aire que les permite respirar sólo durante 30 minutos.
“Es primordial que no te sorprendan, porque si te sorprenden, estás muerto”.
Extreman las precauciones en todas sus labores. Así desactivaron bombas lapa fabricadas por la banda terrorista ETA.
En 40 años, 13 agentes han muerto en acto de servicio y 40 han resultado heridos.
Autor: Antonio Abarca