Ocurrió hace apenas dos días en Moratalaz, Madrid. Todo empezó con una llamada al 112 por un incendio en un piso.
Bomberos, policía nacional y local se desplazaron de forma urgente. El olor del humo ya les hizo sospechar y delató al propietario. Se había quemado su plantación ilegal de marihuana por un fallo eléctrico en la instalación.
El propietario del piso fue detenido en el mismo portal de la vivienda, su cara estaba ennegrecida por el hollín, había intentado salvar sus plantas.
La cosa no fue a más debido a la rápida acción de los actuantes, según los bomberos se debía a un fallo eléctrico. El cable ardió al no soportar la tensión de la luz.
Unas 100 plantas de marihuana de más de un metro de altura, germinadas, lámparas, extractores, material aislante fueron intervenidas. Algunas quemadas.
Enhorabuena a los compañeros del distrito de Moratalaz, alguno aún continúa algo mareado.
Fotografía de archivo, Policía Nacional.