La operación IGNIS que ha destapado en Valladolid la mayor estafa funeraria hasta la fecha y de la que venimos ofreciendo detalles:
Llega a la tercera fase de la investigación.
FASES:
1) REGISTROS a partir de una denuncia de un exempleado, que trató de extorsionar a la empresa y fue condenado por ello, comenzó la investigación.
Se realizaron siete registros en oficinas y centros de la funeraria El Salvador de Valladolid.
2) DETENCIONES LIDERES DE LA ORGANIZACIÓN, el dueño de la empresa (prisión sin fianza), su hijo (prisión con fianza de 800000 euros) y la hija (prisión con fianza de 400000)
3) DETENCIONES EMPLEADOS hasta la fecha 26 detenidos, todos ellos en libertad, una vez se les ha tomado declaración. Son el 40% del total de 70 empleados de la empresa, no se descartan nuevas detenciones.
4ª) PENDIENTE LA ÚLTIMA FASE: BLANQUEO DE CAPITALES.
Unas 600 denuncias han logrado conseguir la Policía Nacional de los 6000 fraudes estimados.
Recordar que el modus operandi era sencillo; cambio de ataúd por otro de menor valor (en algunos casos se tiene constancia que a los fallecidos se les incineraba sobre palés), reutilización de flores… En definitiva, cambiaban las condiciones contratadas por los familiares para el sepelio.
Tanto la agencia tributaria, como el grupo de homicidios de la policía nacional de Valladolid, se hallan encargados de la investigación.
Se estima que la estafa puede sobrepasar los 15 millones de euros.
La investigación coincide con la expansión de la empresa, habían aumentado recientemente la plantilla, reformado los centros, inversiones en propiedades, nuevas funerarias…
Una testigo, extrabajadora de la empresa, confirma que este fraude pudo realizarse hasta 2018 que comenzó la investigación y no hasta 2015 como se había contrastado inicialmente.
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