Francisco Javier Fernández Lajusticia, de 43 años, era natural de Logroño, estaba casado y tenía tres hijos. Murió en el atentado perpetrado el 7 de diciembre de 1984 por los miembros del comando Vizcaya de ETA. La explosión de un coche le mató junto al teniente Juan Enríquez Criado y el cocinero civil Luis Alberto Asensio Pareda.
Las víctimas viajaban en un microbús que transportaba a catorce militares y empleados civiles y que iba escoltado por dos Land Rover de la Policía Militar, uno delante y otro detrás. En su interior viajaban dos tenientes, un subteniente, un sargento y cinco soldados, así como el cocinero, la empleada de la limpieza, otro civil y el capellán del cuartel del Regimiento de Infantería número 45 de Garellano, con base en Munguía.
Se dirigían a Bilbao, el atentado estaba planificado. Un vehículo estacionado en el arcén y cargado con más de 20 kilos de Goma 2 y gran cantidad de metralla, fue activado mediante un telemando por miembros de la banda terrorista ETA. La explosión se produjo justo en el momento en que el convoy reiniciaba la marcha después de haberse detenido brevemente en una señal de stop. El Seat 1500 que contenía la carga saltó por los aires, esparciendo la metralla en un radio de muchos metros.
n memoriam de los militares:
– LUIS ASENSIO PEREDA
– JUAN ENRÍQUEZ CRIADO,
– FRANCISCO JAVIER FERNÁNDEZ LAJUSTICIA
Asesinados por ETA tal día como hoy en 1984 #NiPerdonNiOlvido pic.twitter.com/btxiHe5LGX
— Asociación Policía H50 (@APoliciah50) December 7, 2024