- La red criminal desarticulada, asentada en Cataluña, está presuntamente implicada en el secuestro y muerte de un hombre cuyo cadáver fue localizado en una zona boscosa del municipio de Botarell (Tarragona) y que había viajado desde Italia para reunirse con algunos de los líderes
- Los secuestradores enviaron una fotografía como prueba de vida a la familia y exigieron 240.000 euros por su liberación, recibiendo un primer pago en criptomonedas de 32.000 dólares
- Los investigadores localizaron en la provincia de Barcelona la vivienda donde, presuntamente, acabaron con la vida del hombre –vivienda que habían pintado y reformado posteriormente- así como el vehículo que utilizaron para trasladar el cadáver hasta el lugar donde fue abandonado
- Durante los registros, los investigadores localizaron un laboratorio de extracción de metanfetamina impregnada en ropa, armas de fuego, material electrónico, dinero, así como indicios relacionados directamente con el secuestro y el asesinato del hombre
Agentes de la Policía Nacional, en una operación conjunta con los Mossos d’Esquadra, han desarticulado una organización criminal, dedicada al narcotráfico internacional y vinculada al cártel mexicano de Sinaloa, por su presunta participación en el secuestro y asesinato de un hombre en Cataluña.
La investigación comenzó el pasado cinco de agosto cuando se localizó el cadáver de un hombre, con signos de violencia y en avanzado estado de descomposición, en una zona boscosa del municipio de Botarell (Tarragona).
Los dos cuerpos policiales iniciaron una investigación a finales del mes de junio tras tener conocimiento, a través de INTERPOL Kosovo y EUROPOL Italia, de las denuncias del padre y la esposa de la víctima. En su denuncia explicaron que habían secuestrado a su familiar en Barcelona y que los autores de los hechos pedían un rescate de 240.000 euros. Un Equipo Conjunto de Investigación formado por agentes de la Policía Nacional y de los Mossos d´Esquadra se hicieron cargo de la investigación para identificar a los secuestradores y localizar a la víctima.
Una organización criminal establecida en el Maresme y Barcelona
Fruto de la investigación se determinó que el hombre habría sido secuestrado por los miembros de la organización criminal entre el 31 de mayo y el dos de junio. Posteriormente, los familiares de la víctima en Kosovo recibieron una comunicación de los secuestradores exigiendo el pago de 240.000 euros por su liberación, aportando una fotografía como prueba de vida.
Días después, la familia se puso en contacto con los agentes para informar que habían realizado un pago en criptomonedas ante la presión que tenían y bajo la condición de volver a recibir pruebas de que la víctima estaba viva. En concreto realizaron el pago de 32.000 dólares en un monedero virtual de criptomonedas, siguiendo instrucciones de la organización para dificultar el rastreo del dinero, pero en ningún momento recibieron noticias sobre la víctima y los secuestradores continuaban exigiendo nuevos pagos.
A lo largo de la investigación los especialistas en ciberdelincuencia pudieron identificar a varias personas vinculadas con esta transacción y directamente relacionadas con el secuestro. Asimismo, el equipo de investigación encontró varios indicios en el interior del vehículo en el que había viajado la víctima desde Italia a Barcelona y que se encontraba en un depósito municipal. Todo apuntó a que los secuestradores habrían utilizado este vehículo para trasladar su cuerpo desde una casa situada en Sant Andreu de Llavaneres (Barcelona) hasta una zona apartada y boscosa de la población de Botarell (Tarragona). El cuerpo sin vida de la víctima fue encontrado por los investigadores el pasado cinco de agosto en avanzado estado de descomposición.
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Vinculaciones con el cártel mexicano de Sinaloa
Los secuestradores, vinculados al cártel mexicano de Sinaloa, están relacionados con delitos de tráfico de drogas a nivel internacional, delitos de blanqueo de capitales, secuestro y asesinato. Recibían paquetes de origen mexicano con metanfetamina impregnada en piezas de ropa que enviaban a Cataluña desde México y una vez en España realizaban el proceso de extracción de la sustancia estupefaciente en un laboratorio que tenían. Aunque vivían en el Maresme y Barcelona, la mayoría tenían una fuerte movilidad internacional hacia varios países europeos y México.
Catorce detenidos, armas, drogas sintéticas y un laboratorio de extracción de metanfetamina
Las gestiones policiales permitieron situar a los investigados en domicilios del Maresme y Barcelona, donde se realizaron las entradas y registros judiciales que permitieron la detención sorpresiva de los partícipes en los hechos y la incautación de los efectos intervenidos, lo que supuso la desarticulación de esta peligrosa organización compuesta principalmente por individuos mexicanos.
La investigación culminó con un operativo policial desplegado en Barcelona, Sant Andreu de Llavaneres (Barcelona), Sant Cebrià de Vallalta (Barcelona) y Cabrils (Barcelona) con un balance de catorce personas detenidas, entre las cuales se encuentra el cerebro del secuestro y líder de la organización. Durante los registros, en cinco domicilios y en un restaurante, se localizó un laboratorio de extracción de metanfetamina impregnada en superficies sólidas como piezas de ropa, así como metanfetamina preparada para el consumo, una gran cantidad de éxtasis y una plantación de marihuana. También se intervinieron armas de fuego, material tecnológico y dinero, así como indicios relacionados directamente con el secuestro y el asesinato de un hombre. Los detenidos, 11 hombres y 3 mujeres, tienen entre 30 y 70 años.
La víctima, de 46 años, trabajaba presuntamente para la organización y había viajado desde Italia a Barcelona para reunirse con algunos de los líderes de la red criminal. El juzgado de instrucción número 2 de Reus ha mantenido el secreto de las actuaciones durante toda la investigación con el fin de no poner en riesgo ninguna de las gestiones que se estaban realizando y que han permitido la desarticulación de la organización criminal. Con el levantamiento del secreto, los agentes comunicaron a los familiares de la víctima su muerte y la localización de su cuerpo.