Un nuevo episodio de evasión ha tenido lugar en el aeropuerto de Madrid-Barajas, donde seis inmigrantes magrebíes ha logrado escapar por el mismo agujero utilizado previamente por otros cinco individuos. El incidente ha generado preocupación entre las autoridades y ha puesto de relieve las vulnerabilidades en los sistemas de seguridad del aeropuerto.
La organización sindical JUPOL ha reclamado medidas urgentes para solucionar la situación de inseguridad de las salas de inadmitidos del Aeropuerto Adolfo Suarez Madrid Barajas ante la nueva fuga de seis inmigrantes de origen marroquí. Los agentes finalmente han podido interceptarlos aunque tres de ellos han logrado huir de las instalaciones del aeropuerto. “La fuga se ha producido por el mismo agujero por el que la semana pasada se fugaron otros cuatro inmigrantes. Una brecha en la instalación que no ha sido reparada ni por parte del ministerio del Interior, ni por AENA, propietaria de las instalaciones”, precisan desde el sindicato.
Los hechos ocurrieron el pasado fin de semana, cuando los seis hombres, que intentaban ingresar a España de manera irregular, encontraron un punto de acceso en la infraestructura del aeropuerto. Según informes, este mismo agujero había sido utilizado recientemente por otros cinco inmigrantes que lograron evadir la vigilancia.
Las autoridades aeroportuarias han comenzado una investigación para determinar cómo se pudo producir esta brecha de seguridad y qué medidas se pueden implementar para evitar que situaciones similares se repitan. Además, se ha reforzado la vigilancia en la zona para prevenir nuevas fugas.
Este suceso pone de nuevo en debate el control de la inmigración y la seguridad en las fronteras europeas. Muchos ciudadanos han expresado su preocupación por la capacidad de los aeropuertos para gestionar y controlar el flujo migratorio, así como por la seguridad de los pasajeros y trabajadores en estas instalaciones.