Las redes sociales han viralizado un vídeo de un hombre atrapando a una presunta carterista en el Aeropuerto de El Prat, Barcelona, y atándola a una barandilla mientras suena de fondo la música de mariachi con la letra “la cucaracha ya no puede caminar”. Este hecho ha generado un intenso debate en redes sociales entre los que muestran su hartazgo sobre los delincuentes que campan a diario por el aeropuerto internacional y los que se posicionan compasibles o mostrándose en contra de este tipo de acciones al margen de la ley. Las imágenes fueron capturadas en video y difundidas por el youtuber Guillem, conocido por perseguir a ladrones en todo el mundo.
El suceso ocurrió en la Terminal 1 del aeropuerto, donde el hombre, visiblemente enfadado, inmovilizó a la mujer atándola con su propio jersey a una barandilla. Durante el altercado, la presunta ladrona gritaba pidiendo que no la tocaran, mientras el hombre le respondía que no la estaba tocando, sino que simplemente la estaba reteniendo.
El video del incidente se ha vuelto viral, provocando una ola de reacciones divididas. Algunos aplauden la acción del hombre, considerándola un acto de valentía y justicia personal, mientras que otros critican la situación como una “vejación pública” y “retención ilegal”. La escena, amenizada por la música de mariachi, ha añadido un toque surrealista al ya de por sí inusual evento.
Este incidente pone de relieve los problemas de seguridad en el Aeropuerto de Barcelona, que ha sido escenario de varios robos en los últimos tiempos. La escena es visualizada a nivel mundial evidenciando la problemática que se vive en España con los carterista, la impunidad con la que actúan y la urgente aplicación de normas contundentes capaces de erradicar este tipo de delincuencia. La vigilancia en el aeropuerto está dividida entre los Mossos d’Esquadra, que patrullan la zona tierra, y la Guardia Civil, que se encarga de la zona aire. El debate sobre los límites de las patrullas ciudadanas que ejercen justicia personal y los derechos de los delincuentes sigue abierto, mientras el video continúa circulando en redes sociales, acumulando millones de vistas y comentarios.
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