Autora Hannan Serroukh*, escritora del libro Coraje el Precio de la Libertad.
Cuando nuestra decadente clase política está enfrascada en el debate sobre los MENAS y la políticas de inmigración con un discurso simplista, unos hablan de las grandes bondades y otros hablan de las supuestas amenazas a la seguridad nacional convirtiendo a todos los que no tenemos apellidos castizos en supuestos criminales. No obstante, en medio de este debate, basado en meros estereotipos, surge la fuerza de la selección de fútbol, la misma selección que meses atrás pocos le veían potencial y que hoy es la razón de muchas alegrías de este país.
Mientras la selección española ha mostrado que el buen fútbol es el resultado del trabajo en equipo, su sacrificio y la constancia. Algunos políticos y tertulianos han caído en la tentación de usar la diversidad que existe en la selección española para reforzar los tópicos argumentos totalmente alejados de la realidad, y mucho más alejados de la gran labor deportiva y social que ha conseguido nuestra selección nacional de fútbol.
Por desgracia los racistas y los que dicen no serlo ven antes el color de piel de Lamien Yamal o Nico Williams que su gran juego, su compromiso y profesionalidad. Ven antes un color de piel que el hecho de haber sido seleccionados porque juegan y viven el fútbol igual que Cucurella, Daniel Vivian o Jesús Navas. Es una decisión profesional no están en la selección para cubrir la cuota exótica están por su talento. Luego están las expresiones de sorpresa sobre el sentimiento de ser español es que Wiliams y Yamal no se sienten españoles por agradecimiento, si no que son tan españoles como Morata, Dani Olmo o Ferran Torres.
Pero como he dicho, esta selección española nos esta dando muchas alegrías y no solo deportivas. Es cierto que detrás de jugadores como Nico y Lamien hay historias de superación. Han sido niños que han crecido teniendo que superar grandes retos, sin embargo, no han dejado que las circunstancias determinen sus vidas y han tenido que ganar muchos otros partidos antes de la Eurocopa.
La primera victoria de estos jóvenes fue que sus padres no les inculcaron resentimiento ni victimismo, ya que nacieron en España y les han educado en la sociedad española con sus valores y costumbres. Lejos de la segregación del multiculturalismo y el folclore, evitando así caer en las sociedades paralelas que han surgido en los barrios más humildes.
A pesar de la desigualdad social y la pobreza, han entendido que no era por culpa de ser hijos de la inmigración o por su color de piel, si no que ser español es también sufrir la pobreza severa que por desgracia existe y no es una cifra menor el 28,3 de los niños españoles que no tienen sus necesidades básicas cubiertas como la alimentación, vivienda ,educación o algunos tratamientos de sanidad.
La selección española nos está enseñando que si todos participamos en un marcó común de convivencia de las mismas normas la diversidad se convierte en un valor añadido y no en fractura y segregación social. Se puede ver la fuerza que esta selección española ha conseguido al interpelar a miles y miles de jóvenes españoles que, a pesar de su arraigo, su sentimiento patriótico como españoles nunca lo han podido expresar con tanta libertad y fuerza como lo están haciendo estos días, esos miles de jóvenes españoles hijos de la inmigración o simplemente hijos de la España pobre, jóvenes de los barrios como las Tres mil viviendas de Sevilla, La Cañada Real de Madrid o el barrio de Rocafonda de Mataro. Esta selección está haciendo una gran labor social al dar reconocimiento y presencia a nuestros barrios más humildes. Esta selección española a puesta por el talento, el trabajo bien hecho y por unos jugadores con valores sólidos lejos de lo que nos tenían acostumbrados aver a jugadores de grandes coches ,relojes y mentes pequeñas.
Siempre decimos que la clase política está alejada de la realidad ciudadana y estos días lo estamos volviendo a ver de nuevo, España no esta ni se hace en los despachos de los políticos, ni en las mesas de los tertulianos
Somos y hacemos España los que a pesar de la desigualdad social, a pesar de la desafección de la clase política y la desidia de las instituciones, decidimos seguir adelante, España esta en cada uno de nosotros con nuestras realidades y nuestras decisiones no nos dejamos abatir. Necesitábamos un reconocimiento como sociedad el símbolo de cohesión social y la selección española de fútbol lo a conseguido el triunfo de estos jugadores se a convertido en el altavoz quien es y hace España