Este lunes un grupo de la Unidad de Intervención de la Policía Nacional de Valencia se traslada a Mallorca por necesidades operativas, alojándose en un hotel que les cuesta a cada policía 58 euros, 10 euros más de lo que perciben por parte de la Dirección General de la Policía y que saldrá de sus bolsillos si Interior no lo remedia con carácter urgente, denuncian desde la Confederación Española de Policía –CEP.
Ante tal aberración, el sindicato policial ha solicitado en reiteradas ocasiones activar la normativa que permite abonar a la Administración la diferencia económica y que los policías no paguen de su bolsillo para ir a trabajar, si bien a día de hoy no se ha recibido la orden de activar esta clausula normativa conocida como la adicional 6ª, por lo que han tenido que tramitar una documentación de viaje en la cual los compañeros asumen la diferencia económica con dinero de su bolsillo, algo que “a día de hoy es una aberración, ¿desde cuándo un trabajador pone dinero de su bolsillo para ir a trabajar?“, remarcan desde el sindicato policial.
Y es que como ya denunció semanas atrás el sindicato policial CEP, llega el verano y la diferencia entre lo que cuesta una noche de hotel y la dieta de alojamiento de un policía nacional es de un 212%, reclamando al Ministerio del Interior que levara las dietas que perciben los agentes ante el récord histórico de los precios de los hoteles y que al menos el dinero que perciban los agentes les cubran los gastos que se les originen por causas laborales.
Y es que el precio medio de una habitación de hotel en España en agosto de 2023 fue de 153€, según fuentes del Instituto Nacional de Estadística, y un policía nacional de la escala básica percibe 48,92€ para hacer frente al pago de una habitación de hotel.
En 2023 se alcanzó el récord histórico en ese precio, que en el caso de las Islas Baleares llegó a los 199,77€ por noche en el mes de agosto y a los 162,07€ en Canarias, en el mes de julio. Esta situación es cada vez más insostenible y desde el sindicato CEP llevan años reclamando soluciones al Ministerio del Interior, “que también se hace el sueco con este asunto”, apuntan, y añaden que “aunque digan que el Real Decreto 462/2002, el que establece el importe de las dietas de alojamiento y manutención, no se puede tocar porque afecta a toda la función pública, la realidad es que sí. Claro que pueden hacer algo más. Claro que hay alternativas y por supuesto que en CEP exigimos que se pongan en marcha ya, como se hizo entre 2004 y 2010”.
Señalan que el artículo 11 de ese Real Decreto sí ampara el elevar en algunas épocas del año y ante el aumento de los precios de alojamiento en hoteles el importe de las dietas. Una práctica que ya se ha hecho y permitió que los policías no sufrieran penurias por hacer su trabajo durante siete años. Y a mayores, el CECIR, que es el organismo que aprueba esas medidas, acordó en 2010 que los Ministerios puedan proponer este aumento de dietas de alojamiento por razones excepcionales.
Desde el CEP remarcan que esta media no es sólo la Operación Verano, entre julio y septiembre. Son los viajes de las unidades de la Policía Nacional entre la que está la UIP de Valencia, ahora perjudicada, e “Interior tiene que dejar de mirar para otro lado en este tema y tomar medidas ya, que todavía estamos a tiempo. Menos sacar pecho con nuestro trabajo y más respaldo real”, reclaman desde la Confederación Española de Policía, que una vez más pone en evidencia las obsoletas dietas de manutención y alojamiento que tienen los policías nacionales, las cuales no cubren los gastos derivados de su actividad laboral, teniendo que aportar dinero de su economía familiar para trabajar.