No puedo hacer otra cosa sino quedarme a cuadros, como se dice en el lenguaje de la calle que es el bueno. ¿Cómo se puede estar sujetando a un gobierno central y en la campaña de unas elecciones autonómicas tirarse al cuello y descalificarse de mil maneras los mismos que se apoyan? ¿Alguien lo entiende? Pues ahí lo tienen. Se puede. Extraños compañeros de cama y anárquicos y desorganizados, empujados solo por el propio provecho.
No sé cuántas veces he dicho, que en el 93, yo personalmente, pagado por el Estado, con mi sueldo de funcionario de nivel treinta, fui cárcel por cárcel, diciéndole uno a uno, a todos los etarras, que el Estado quería que entraran en las instituciones – parlamentos, ayuntamientos, diputaciones, etc…- y que entraran en la vida política dejando de pegar tiros y de poner bombas lapa por las noches debajo de los coches. Esa era la finalidad principal: dejar los muertos y comenzar a discutir en los foros adecuados. Esto ETA lo interpretó como una agresión, necesitada de una respuesta contundente, y puso precio a mi cabeza acusándome de ser traficante de sufrimientos – los de ETA que no ocasionaba ninguno a nadie-. Decían que al que no entraba por el aro de mis propuestas, lo mandaba a cumplir al Salto del Negro en Canarias. Puñetera mentira. Pregúntenle a Kubati, alto cargo ahora de Sortu, al que no saqué de Burgos y lo podría haber mandado donde hubiese querido cuando en el famoso EGIN me amenazó diciendo: ¡Ojalá un día me despierte con una buena noticia! – por la mañana era cuando normalmente tenían lugar los atentados. Ya lo contaré despacio en esas memorias que me pide mi amigo Juan Eslava.
Ahora, en la campaña vasca, noto un acojono casi generalizado, salvo de los que nada tienen que perder porque ya están fuera del partido. Los tres en disputa: PNV, Bildu y PSOE, echan el resto por distintas razones. Los de Bildu piensan que por primera vez pueden ser el primer partido de Euskadi, el PNV está seriamente acojonado por si Bildu lo adelanta. He visto a Ortuzar, con un prognatismo a los Carlos V, temblándole la barbilla, pedir que los indecisos se decanten por ellos sin dudarlo. Los de Bildu, antisistemas de pedigrí, hasta le han puesto unas gafas a Otxandiano – chico ordenanza de Otegui- para que parezca un chico inofensivo, profesor de instituto de latín, que no ha roto jamás un plato. Andueza, el socialista, sabe de sobra que no va a ganar y solo aspira a ser bisagra esto va de prognatismo cromañón, porque Andueza parece el hijo de Ortuzar y lo digo sin acritud porque yo soy feo de cojones y no puedo presumir ni de belleza ni de saber informática.
Claro está que ser bisagra es un problema gordísimo. Si Bildu saca uno o dos disputados más que los PNVs, ya tiene Sánchez el problema como lo ha tenido en Pamplona. El PSOE en bloque, al que Sánchez domina en un puño, no quiere tener que dar explicaciones cuando le pregunten una y otra vez por qué entrega el gobierno de Euskadi a “los terroristas”. Ellos quieren ser segundones de Ortuzar, el pobre Pradales es solo una marioneta movida por el Euskadi Buru Batzar y mandar a Bildu a la oposición para que madure y a ver si somos capaces ya de dejar de hablar de ETA que lleva años y años sin hacer nada, aunque grandes asesinos sigan en la cárcel blandita y soñando un tercer grado más blandito todavía para acabar de cumplir sin sentirlo siquiera. Ahí tienen a mi amigo Gadafi, Iglesias Chouzas, el asesino de mi amigo Joseba Goicoetxea, que es el que manda ahora en Basauri. Todos de rodillas ante Bildu. Si no que alguien me explique una cosa sencilla: ¿Por qué han promocionado, difundido y alabado la patochada “Maixabel” y han puesto todos los palos posibles en las ruedas para hacer “De prisiones, putas y pistolas”? Esa es una historia real, el encuentro idílico de víctimas con verdugos ha sido posible porque Etxabe y Urrutia criticaron a la banda que mataba niños. Sus críticas removieron el pensamiento de los “militantes” y a partir de ellos – declarados traidores mientras Otegui era el hombre de paz- empezó el goteo cada vez más rápido, al grito silencioso de maricón el último.
No queda la cosa en las vascas porque el acojono va a seguir. Sigue con las catalanas. ¿Gobernará Illa? ¿Tendrán que volver nuevamente los extraños compañeros de cama y unirse los republícanos con la derecha porque todos son igual de independentistas? Los Puigdemones suspiran por gobernar con Esquerra para apretarles las tuercas con el referéndum y marginar a Illa por españolista.
Las importantes realmente son las europeas que van detrás porque serán unas primarias para ver el poder real de Sánchez y de Feijoo. Ahí se va a ver si en España Sánchez ha caído o ha crecido con esa amnistía tan irregular y patatera y esas leyes que pretenden nacidas para el bien público y no su provecho particular.
En mi calidad de anciano pobre y desesperanzado, me da exactamente igual. Vivo en una situación ciceroniana: sin miedo y sin esperanza. Si me quitan la pensión que me he trabajado cotizando cuarenta años más los cuatro que trabajé – explotado- niño y de manera pirata para sobrevivir, atracaré y me garantizaré unos últimos días relajados en la enfermería de alguna cárcel.
Tengo un mínimo motivo de alegría: un hijo. El próximo viernes, con el Real Casino Liceo de Alicante lleno hasta la bandera, en su restaurante Teselas, presento 357 Magnum. Por ti me juego la salvación. No soy el más indicado para ser juez de mi propia obra. En esta novela negra, histórica y antropológica, que ha sido el primer móvil para organizar el QUIJOTE NEGRO E HISTÓRICO del que os daré muy pronto noticia detallada, hay una mezcla, mitad y mitad, de ficción y realidad. Los tres adjetivos los cumplo al pie de la letra: Negra – con episodios violentos y de investigación policial-. Histórica – con retratos detallados de la España franquista pobre, con colegios de curas reprimidos y pueblos con curas que mandaban y ordenaban la pureza y la castidad de costumbres mientras se morreaban con la novia en la sacristía-. Antropológica – me recreo en la condición humana y su grandes problemas, la muerte, el amor, el abandono, el desamor, la soledad, las arquitecturas jurídicas para justificar los injustificable.
No compren el libro, por favor, que alguien compre uno y a los demás les doy permiso para fotocopiarlo. Imparto un taller literario en la Universidad de Alicante y no cobro. He dado un taller genial – por los alumnos- en la Universidad de Almería y no cobro. Voy a hacer, con explosiones de placer continuadas, el “Quijote negro e histórico” y no cobro. Tengo bastante con mi pensión – tras cuarenta años jugándome el pescuezo y cuatro de trabajo pirata y explotado con Franco vivo- y si entran varios pagadores, la Montero me fastidia por no decir que me jode. No quiero problemas con Hacienda a las puertas de la muerte. Lean el 357 Magnum, no obstante, aún sin comprarlo, porque verán en él mi desprecio por los vividores, los pelotas y los chaqueteros. Por los vagos y los trepas, por los correveidiles y los farsantes. Por los que son sumisos ante el poder y duros y dictadores con los débiles.
Me encantará comentarlo en Teselas el día 26, repleto de gente y hecho solo por la pulsión de la escritura que es, como he dicho mil veces, un remedio esencial contra el Alzheimer, ese alemán cabrón que nos ciega la mente y nos impide llegar con la lucidez debida a enfrentar las puertas del Hades después de atravesar la Laguna Estigia.
Sr. Avilés, como siempre, ha estado usted irónico socarrón, divertido; pero sobre todo lúcido y claro. No hay más ciego que el que no quiere ver y nos ha tocado estar rodeados de gente que sólo ve su culo y la poltrona donde quiere ponerlo. No hay proyecto de país en los partidos más grandes, ni siquiera proyecto de partido. Me queda el consuelo de sus libros y de procurar cumplir con mi conciencia. Un saludo.
PD.: Fue un placer oírle y saludarle en Moraleja, en Gata Negra.
Un ertzaina.