La Policía Nacional logró identificar a los autores pese a que intentaron ocultar el origen de las mismas, mediante el uso de números ocultos, realizando las llamadas sin tarjeta SIM o empleando distintos terminales telefónicos
Además de a la posible sanción penal que lleva aparejada el delito de desórdenes públicos, tendrán que hacer frente a la responsabilidad civil que el SESPA ha valorado en más de 19.000 euros
A las 22:30 horas del 10 de mayo de 2023, se recibió una llamada en la Sala de Emergencias del 112 de Asturias, alertando de la colocación de una bomba en el Hospital Central Universitario de Asturias (HUCA), lo que se puso en conocimiento de la Policía Nacional, a través de su Sala 091-CIMACC.
La amenaza se realizó de manera anónima y desde un número oculto, encontrándose en ese momento centenares de pacientes, familiares y trabajadores en el centro hospitalario.
Este hecho generó la inmediata activación de los recursos policiales y de emergencias oportunos tendentes a comprobar la veracidad de los hechos, así como a garantizar la seguridad ciudadana en la zona y la integridad las personas.
Finalmente y tras las comprobaciones policiales que se prolongaron durante varias horas, dadas las dimensiones del centro hospitalario, se logró determinar que se trataba de una falsa amenaza.
Como consecuencia de todo ello y al margen de la movilización de los servicios de policía y salvamento, el HUCA se vio obligado a modificar su habitual actividad afectando el normal desarrollo.
Por todo ello, el Servicio de Salud del Principado de Asturias valora económicamente en de más de 19.000 euros los perjuicios ocasionados por la llamada alertando falsamente de la colocación de la bomba en el Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) aquella noche.
Con posterioridad y en varias ocasiones durante los siguientes meses, se produjeron hasta un total de otras 12 nuevas llamadas de similares características alertando de manera falsa nuevamente de la colocación de un artefacto explosivo en el HUCA, provocando todas ellas la movilización de servicios policiales así como recursos de emergencias, si bien no se llevo a cabo la evacuación del HUCA.
La investigación de estos hechos correspondió a la Brigada Provincial de Información de Oviedo, de la Jefatura Superior de Policía Nacional de Asturias. El grupo investigador logró identificar a los autores pese a que intentaron ocultar el origen de las mismas, mediante el uso de números ocultos, realizando las llamadas sin tarjeta SIM o empleando distintos terminales telefónicos.
Ahora además de a la posible sanción penal que lleva aparejada el delito de desórdenes públicos recogido en el artículo 561 del Código Penal, tendrán que hacer frente también a la responsabilidad civil consecuencia de la misma y que el SESPA ha valorado en más de 19.000 euros.