Los hechos tuvieron lugar en los prolegómenos de los partidos del Real Oviedo contra Leganés y contra Racing de Santander.
Se han tramitado 38 actas por infracción a la Ley 19/2007, contra la violencia, el racismo, la xenofobia y la intolerancia en el deporte.
En el vehículo de uno de los denunciados se incautó un hacha de grandes dimensiones.
La Policía Nacional remarca que el deporte, y más en concreto el futbol, es un punto de encuentro social, sin embargo, en no pocas ocasiones la rivalidad existente puede llevar a crear intensos sentimientos de pertenencia, que mal entendidos, al amparo del presumido anonimato de la masa, pudieran sobrevenir en comportamiento violentos en unos casos, y en otros de intolerancia, odio y discriminación hacia el rival.
Es competencia de la Policía Nacional en el ámbito urbano, en el caso que nos ocupa en los partidos del Real Oviedo que juega en el Carlos Tartiere, establecer los dispositivos preventivos a fin de evitar que esas manifestaciones de rivalidad puedan constituirse en ilícitos penales o infracciones administrativas.
De ese modo, el pasado día 27 de enero, dentro del dispositivo de seguridad que la Policía Nacional estableció con ocasión del desarrollo del partido de Segunda División entre Real Oviedo y el CD Leganés, tanto en el recinto deportivo, como en sus aledaños, se detectó, en los momentos previos al encuentro, un grupo de unos 30 aficionados del equipo visitante que se encontraba en la zona del campus de El Cristo, en actitud pacífica esperando el inicio del partido.
Posteriormente, funcionarios policiales observaron a un numeroso grupo de unos 70 aficionados radicales seguidores del Real Oviedo, miembros de un grupo al cual la Comisión Estatal contra la violencia, el racismo, la xenofobia y la intolerancia en el deporte ha prohibido realizar o proporcionar cualquier tipo de apoyo, promoción o difusión a sus actividades, que se acercaban a la carrera y en clara actitud violenta, ocupando la calzada, en dirección al grupo del Leganés.
A pesar del gran número de radicales, de la hostilidad de los mismos y de que llegaron a arrojarse botellas de cristal entre ambas aficiones, la rápida actuación de los efectivos policiales desplegados logró disolver y hacer huir del lugar al grupo agresor, evitando de esta manera un más que probable incidente violento tumultuoso de graves consecuencias.
Los miembros del grupo agresor, iban vestidos de negro y ocultaban su rostro mediante capuchas, embozos y gorras, al objeto de dificultar su identidad. Sin embargo, las posteriores labores de investigación llevadas cabo por la Brigada Provincial de Información, permitieron identificar plenamente como partícipes en los incidentes violentos a más de 30 aficionados radicales seguidores del Real Oviedo, los cuales han sido propuestos por infracción administrativa en virtud de la Ley 19/2007, contra la violencia, el racismo, la xenofobia y la intolerancia en el deporte.
Igualmente ese día, y al inicio de ese mismo partido, con el objetivo de lograr la identificación de los integrantes de ese grupo que participaron en el incidente, se establecieron controles en las puertas de acceso a la denominada grada de animación del estadio Carlos Tartiere, procediendo a la expulsión del recinto de seis personas que se encontraban con evidentes síntomas de acceder al estadio bajo los efectos de bebidas alcohólicas, de drogas tóxicas, estupefacientes o sustancias psicotrópicas para lo cual se realizaron los preceptivos controles de alcoholemia, al amparo de lo determinado en el artículo 45 del Real Decreto 203/2010, de 26 de febrero, que aprueba el Reglamento de prevención de la violencia, el racismo, la xenofobia y la intolerancia en el deporte.
De otra manera, el pasado 16 de marzo, se celebró en Oviedo el encuentro de fútbol entre el Real Oviedo y el Racing de Santander, el cual había sido declarado como partido de ALTO RIESGO por la Comisión Permanente de la Comisión Estatal contra la Violencia, el Racismo, la Xenofobia y la Intolerancia en el Deporte.
Por ese motivo, se estableció un dispositivo preventivo al efecto por parte de la Jefatura Superior de Policía de Asturias, fruto del cual se pudo detectar la concentración de radicales de uno y otro equipo en varios lugares de la ciudad.
Como consecuencia de esos controles y chequeos preventivos, funcionarios de la Brigada Provincial de Seguridad Ciudadana, aislaron a ambas aficiones radicales, procediendo a la identificación de más de 100 integrantes del grupo ultra del Racing de Santander denominado “Juventudes Verdiblancas”. Estos seguidores acudieron en vehículos particulares, con la presumible intención de evitar las medidas de seguridad dispuestas por la Policía Nacional y facilitar asimismo un posible enfrentamiento entre los aficionados más radicales de ambos clubes.
Durante el dispositivo policial se intervino un hacha de grandes dimensiones, un spray de defensa personal, un artefacto pirotécnico, varios pasamontañas, decenas de pegatinas con mensajes incitadores a la violencia y varias sustancias estupefacientes, por lo cual se propuso a 7 aficionados radicales visitantes por infracción a la L.O. 4/15 de Protección de la Seguridad Ciudadana, así como a la Ley 19/2007, Ley contra la violencia, el racismo la xenofobia y la intolerancia en el deporte.
La anticipación y labor preventiva de la Policía Nacional, evitó un nuevo enfrentamiento de incierto desenlace entre aficiones futbolísticas radicales, que si bien en ningún caso son conductas generalizadas entre los aficionados del Real Oviedo, si existe un cierto grupo de seguidores ultras que emplea la cobertura que les blinda su supuesta condición de aficionados para realización de conductas antisociales, actitudes vandálicas y comportamientos violentos, racistas y xenófobos, alejados de la convivencia social y que en ningún caso respetan los principios de la ética deportiva y el derecho de las personas a la diferencia y a la diversidad.
La Ley 19/2007, de 11 de julio, contra la violencia, el racismo la xenofobia y la intolerancia en el deporte, en su capítulo II establece para las personas físicas sanciones que van desde los 150 euros a los 3.000 euros en caso de ser infracciones leves, 3.001 euros hasta los 60.000 en caso de ser infracciones graves o desde los 60.001 a los 650.000 en caso de ser muy graves.