Independientes de la Guardia Civil -IGC- muestra su preocupación al conocer las elevadas cifras de suicidios consumados en el colectivo de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado el pasado año 2023 y que han sido reportadas por el Gobierno en respuesta a la pregunta del grupo parlamentario del Partido Popular.
A lo largo de 2023 un total de 16 agentes decidieron poner fin a sus vidas de forma voluntaria, 6 de ellos pertenecientes a la Policía Nacional y 10 al Cuerpo de la Guardia Civil.
IGC considera prioritario adoptar, y de manera urgente, una serie de medidas para corregir esta estadística negra para el colectivo policial, por lo que solicitan a la Administración que los protocolos de prevención de suicidios estén sometidos a un continuo seguimiento, entendiendo que deben ser protocolos vivos y deben revisarse de forma recurrente estudiando y actualizando las medidas a los tiempos y realidades de hoy en día y al tipo de trabajo policial que realizan los agentes bajo situaciones de gran presión y estrés.
Además, recalcan, es importante que los guardias civiles puedan recurrir a un servicio psicológico externo a la propia Guardia Civil, ya que resulta una dificultad añadida el hecho de que un agente tenga que acudir a un mando para expresar su necesidad en materia psicológica, ya que esto puede coaccionar a la persona que necesita ayuda en una situación de necesidad, al considerar que el simple hecho de exponer su situación ante un superior jerárquico podría llegar perjudicarle en su puesto de trabajo.
