Según han publicado el eldiario.es y antena3.com, y confirmado por los propios investigadores de la Policía Nacional, se sospecha que los cadáveres eran incinerados sin ataúd.
Las fotografías aportadas en un pendrive por el extrabajador del grupo funerario El Salvador que denunció la estafa, son los primeros indicios que hallaron los investigadores.
Esto les hizo sospechar que no se intercambiaban los ataúdes, sino que simplemente introducían los cadáveres en el horno crematorio sobre palés o cajas de cartón.
Ahora los investigadores tratan de contrastar el número de ataúdes adquiridos por el grupo funerario de sus proveedores con el número de incineraciones y demostrar de ese modo que los ataúdes no eran incinerados junto al cadáver.
Estos nuevos datos, implican que se les podría añadir a los investigados un delito de mala praxis en la manipulación de cadáveres.
Se trata de la Operación Ignis, bautizada así por el nombre del dios del fuego, que se desarrolló el pasado jueves por la Policía Nacional en varios tanatorios del grupo funerario El Salvador en Valladolid.
Hasta el momento ya se han producido 15 detenciones, si bien 13 de ellos ya han sido puestos en libertad con cargos, mientras que al propietario del grupo funerario se le ha decretado prisión comunicada sin fianza, mientras que para su hijo se decretó prisión eludible con 800.000 euros de fianza.
Los 15 detenidos están siendo investigados por delitos continuados de falsedad y estafa, delito contra la hacienda pública, blanqueo y organización criminal.