Poco más de 3600 internos fueron puestos en libertad condicional durante el año 2020 en España. Dato que aparece reflejado en estadísticas del ministerio.
Según la COPE existen un total de 63 funcionarios desde 2017 en todo el país que se encargan de supervisar y vigilar a todos los presos que han recibido la libertad condicional.
La cifra y su ratio, si tenemos en cuenta solo ese año, es tremenda. Reiteramos que solo serían los de un año.
Bien es verdad que los presos en libertad condicional suelen salir con medidas judiciales (presentación, prohibición de residir, comunicar cambios residenciales…) controladas a través de presentaciones periódicas, pero en general su libertad ambulatoria no está limitada.
Ni la Policía Nacional ni Guardia Civil llevan un control de presos. Tampoco legalmente están facultados para hacerlo.
Mas vigilancia en las cárceles que fuera de ellas:
El caso concreto de Almeida, asesino del menor en Lardero. Se halla en la cáecel de La Rioja y tiene más controles en la cárcel que fuera de ella. Sometido al programa antisuicidios. Está acompañado por un preso en todo momento, que se encuentra en una celda colindante separada por una mampara.