Un año más, los policías que participarán en la “Operación Verano” tendrán que pagarse el alojamiento y la manutención de su propio bolsillo. Así lo ha afirmado el Sindicato Unificado de Policía (SUP) si la Dirección General de la Policía no atiende las reclamaciones. “Los policías que viajan a zonas turísticas para reforzarlas durante los meses de verano, reciben unas dietas desfasadas e insuficientes, justo en las zonas en las que el coste de la vida se dispara en vacaciones”, afirman los representantes de los agentes.
“Las dietas que van a recibir los más de dos mil policías que tendrán que viajar en comisión de servicio para reforzar las áreas turísticas en los meses de julio y agosto, están desfasadas y rozan lo mezquino. Las dietas que percibirán los agentes no han crecido desde que las fijó un Real Decreto en 2002, mientras la carestía de la vida se ha disparado y el Índice de Precios al Consumidor (IPC) ha subido un 50’4% en estos veinte años. A todo esto, hay que sumarle los precios hoteleros y de manutención en esas mismas zonas turísticas, mucho más elevados que en el resto de España y más en época estival”, analizan desde el SUP.
El resultado es que, de no atenderse las insistentes reivindicaciones anunciadas desde la organización, miles de policías tendrán que pagarse de su bolsillo el alojamiento y la manutención durante los meses que presten servicio dentro de la “Operación Verano”, con la consiguiente repercusión negativa en la calidad de sus alojamientos y de la alimentación necesaria.
Por todas estas razones, desde el SUP exigen de nuevo al Ministerio de Interior que actualice de forma urgente el Real Decreto de 2002, adaptando las dietas a la realidad del año 2002. “Anticipando la respuesta del Ministerio, si no pueden actualizar el decreto con la premura debida, instamos a la Dirección General de la Policía a que pida a la Comisión Interministerial de Retribuciones una subida extraordinaria de las dietas. Además, ante la llegada inminente de la época estival, exigimos a la DGP que destine una partida extraordinaria para aumentar las dietas y evitar que miles de policías tengan que trabajar otro verano bajo condiciones indignas”, sentencian.
Desde el SUP ya se han presentado esta batería de medidas urgentes ante el Consejo de la Policía. “No puede volver a ocurrir que los policías enviados lejos de sus hogares a garantizar la seguridad y el bienestar económico de las zonas turísticas, tengan que pagar para trabajar”, manifiestan.
